domingo, 27 de octubre de 2019

Aquí andamos

Yo era lo que era cuando fui,
sigo siendo lo que soy ahora.
Seré cuando sea lo que intuí;
lo que hubiese sido, ignora.

No sé a la mañana siguiente

lo que no quise saber de noche,
y si me apuras, soy consciente,
que conozco y no el reproche.

Vomito las ideas sin pensar

siquiera si acaso debería
partir de mí, leer, considerar
si lo que sé igual no sabía.

Me siento, sentado en el suelo,

como si estuviese levantado.
Y si me hace falta consuelo,
alzo el cuerpo sin sentir pecado.

Oigo el rebuznar de alguno

y el piar de ciertas avecillas.
Ningún animal aquí reúno,
sino creadores de manecillas.

La falta de espacio me anega

cuando enciendo la oscuridad,
tal vez la helada veraniega
tenga a bien decirme mi edad.

Miro todo cuanto al ojo cae

y a veces incluso algo veo,
dicho lo cual, esto me retrotrae
a algunos recuerdos que bloqueo.

Procuro analizar las palabras,

como bien decía el maestro,
fijándome en analizarlas
siempre en torno a su contexto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario