domingo, 4 de septiembre de 2016

El Diario Mensual 08/01/2016

Dos personas son acusadas de homicidio en decimoquinto grado
Los sujetos fueron detenidos a raíz de los asesinatos de diez hormigas y tres moscas.


Geriberto Viudo Peláez 

El pasado jueves, siete de enero de 2016, dos personas de Hortajal de Buasoa, R.M.D y J.R.H, de 19 y 23 años de edad, se encontraban reposando de las festividades navideñas y sus excesos, cuando vislumbraron tres moscas zumbando por la habitación. En ese momento, el joven de diecinueve años, haciendo acopio de un arma mortífera (un matamoscas de plástico y varilla de acero toledano) embistió de forma deleznable y furibunda contra los tres pobres dípteros, que quedaron indefensos ante su agresor y nada pudieron hacer, a pesar de su magnífico dominio del vuelo en pista cubierta, para salvar la vida.
Resultado de imagen de matamoscas
Una de las armas empleadas en el homicidio.

Con mirada fehaciente y cómplice, su amigo de veintitrés informó al agresor de un pequeño cúmulo de hormigas realizando sus quehaceres en un rincón de la cocina, tras lo cual se acercó al armarito del fregadero, se armó con un spray de veneno y roció a los insectos. Acto seguido, el asesino de las moscas llegó al rincón y remató a las hormigas con el matamoscas que aún tenía entre las manos. Fallecieron un total de diez.

“Nunca nos lo hubiésemos imaginado. Parecían unos chicos simpáticos, buena gente; pero jamás habríamos pensado que serían capaces de una cosa así”, declaró uno de sus vecinos, poco después de acudir la policía al domicilio de los jóvenes. “¡Madre mía…! Y nosotros viviendo con estos locos sin sospechar nada…”, comentó otra de las vecinas, desencajada tras enterarse de la noticia.

Resultado de imagen de jovenes detenidos
Los jóvenes, saliendo detenidos de su domicilio poco después de cometer el crimen.

Aunque el juicio está aún por celebrarse, ambos confesaron en el acto, a partir de lo cual las autoridades suponen al menos tres años de cárcel para el joven de 23 y cinco para el de 19, así como una posible multa de hasta 1.000.000 euros, que serían repartidos entre los familiares de las moscas y la colonia de las hormigas. Ni unos ni otros han querido hacer declaraciones; profundamente dolidos tras el suceso.


No hay comentarios:

Publicar un comentario